Devórame otra vez by Alissa Brontë

Devórame otra vez by Alissa Brontë

autor:Alissa Brontë [Brontë, Alissa]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Erótico
editor: ePubLibre
publicado: 2020-09-16T00:00:00+00:00


Capítulo 9

Luchando contra la oscuridad

La luz tímida del sol, luchando contra la oscuridad, me despierta. Me siento feliz, viva, satisfecha. Lo primero que veo al abrir mis ojos es a él.

Descansa abrazado a mi cintura y me permito contemplarlo en silencio. Su suave respiración es acompasada y parece tranquilo. Observo con detenimiento su hombro, ahora puedo distinguir con claridad el tatuaje que lleva.

Es extraña la figura que forman ambos dibujos y a la vez armoniosa. El sol abriga en su interior una luna oscura, protegida por un sol afilado cuyos rayos se asemejan más al fuego crepitante de una chimenea.

No tengo un recuerdo claro de la primera vez que vi ese tatuaje, aun así, lo recordaba más pequeño. Sin ser consciente de ello, he llevado mis dedos hacia su brazo y dibujo con trazos imaginarios las líneas. Es hermoso, es oscuro y luminoso, fuerte y tierno, como me gustaría que fuese él.

Es tarde, si no me doy prisa no llegaré a tiempo al trabajo y no me apetece otra bronca cariñosa de mi jefe. Llevo una semana horrible y necesito algo de paz, aunque dentro del caos y el desasosiego, él me ha regalado una noche maravillosa. Todavía siento el agua caliente sobre mi cuerpo y cómo suavemente limpió los restos de nuestro encuentro.

Me levanto en silencio después de liberarme de su fuerte abrazo y camino de puntillas para no despertarlo. Tal vez, debería. Puede que llegue tarde a trabajar también, pero me gusta observarlo. Prepararé el desayuno y después dejaré que el olor a café recién hecho obre su magia. Hago una gran cafetera, zumo de naranja recién exprimido y pongo en el tostador unas rebanadas de pan.

Me siento relajada por primera vez en días. Pero claro, después de la noche pasada con él…

Un leve calor se enciende dentro de mí, justo en el estómago, acompañado de un cosquilleo suave que me murmura que estoy loca por él, desde siempre.

Quiero negarlo, pero no puedo. He pasado muchas noches imaginando un reencuentro con él, planificando miles de situaciones, inventando cientos de conversaciones y la única que no tuve en cuenta fue la que sucedió.

—Buenos días, piernas largas —saluda a mi espalda mientras me aprieta por la cintura y me atrae con fuerza contra su pecho: desnudo, firme y duro.

—Buenos días, ¿café? —preguntó tratando de ignorar que ese gesto sencillo ha humedecido mis muslos y ha hecho que mi corazón se descuelgue entre mis piernas.

—Sí, por favor, corto de leche y una cucharada de azúcar.

Lo miro a los ojos y me encuentro de nuevo atrapada en su mirada plateada. Observo que no lleva nada que cubra su pecho y me deleito con la imagen de sus músculos definidos, sus brazos fuertes, sus piernas firmes. Está muy guapo con el pelo desaliñado, la barba amenazando con salir y los vaqueros desabrochados.

De nuevo, el murmullo molesto me susurra que estoy loca por él.

No sé qué decir, de repente me he puesto muy nerviosa. Siento las palmas de las manos sudadas y resbaladizas. El calor se va haciendo más intenso.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.